Si os hablo de "hornazos" seguro que pensáis en esos que se hacen de masa horneada con un huevo en su interior y que, con imaginación y habilidad, tienen originales formas.
Pues hoy os voy a enseñar otros hornazos: los hornazos de galleta.
La verdad que no sé su lugar de procedencia, sólo sé que mi abuela nos los hacía de pequeñas el domingo de Resurección, porque era una costumbre de su pueblo. No sé si de algún lugar más. El origen, lógicamente, va unido a los huevos de Pascua.
El pueblo en cuestión es Almargen, un pequeño pueblo de la provincia de Málaga, en la Serranía de Ronda, de unos 2.200 habitantes.
Allí aún viven unos primos, y uno de ellos me ha dicho
que todavía se hacen los hornazos de galletas, y que el ayuntamiento organiza todos los años, el domingo de Resurección, un concurso. click para más información
Allí aún viven unos primos, y uno de ellos me ha dicho
que todavía se hacen los hornazos de galletas, y que el ayuntamiento organiza todos los años, el domingo de Resurección, un concurso. click para más información
En el concurso las bases son claras: se pueden usar cualquier tipo de galletas y golosinas, unidas con caramelo de azúcar, sin usar soportes para sostenerlos (cartulinas, papel, cartón...), y uno o varios huevos cocidos formarán parte de la composición.
El básico, tal como lo hacía mi abuela y tal como lo recuerdo, es así:
Necesitaremos: huevos cocidos, galletas redondas, lacasitos y caramelo espeso.
Empezamos cociendo el huevo normalmente.
Partimos las galletas por la mitad.
Usamos caramelo como pegamento. Para ello debéis untar los filos de las galletas, usando un pincel o cualquier otro instrumento.
Pegamos las galletas al huevo, a modo de "alas". Una galleta entera nos servirá de base.
Para terminar, pegamos lacasitos de colores para decorar y darle color.
Usando la imaginación, galletas de más formas y diferentes golosinas, podéis hacer hornazos muy divertidos y originales. Dignos para el concurso. Aquí tenéis otra muestra:
Os podéis ayudar apoyándolos sobre algo.
La mayor dificultad es que el huevo se mantenga vertical y manipular el caramelo caliente.
Espero que os haya gustado la idea, que os resulte divertido prepararlos y que os animéis a preparlos. A mí me ha supuesto un regreso a mi infancia.
¡¡ Feliz Pascua!!
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